Después de unas largas vacaciones en Playa Serena lamentablemente tuvimos que volver a casa en la jungla de cemento la semana pasada. La ciudad nos recibió con calor y mucha lluvia que todavía persiste, la humedad es insoportable. Ya nos habíamos desacostumbrado a este clima tan espantoso. Al lado del mar el clima era mas fresco y agradable. Pero todo lo bueno en algún momento se acaba y aqui estamos de nuevo para comenzar con las actividades del año. Mariano ya empezó las clases el lunes pasado y Flor las comienza el miercoles que viene. Y yo ya empecé con mis cosas.
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